05/14/13

SAN SEBASTIÁN (Fernando Hierro, siglo XX)

Esta imagen es un cuadro de la ciudad de San Sebastián del artista Fernando Hierro y que en la actualidad se puede visitar en el museo San Telmo  que está en San Sebastián, concretamente en la Plaza Zuloaga 1.

San Sebastián (en euskera Donostia, que comparte cooficialidad con San Sebastián) es una ciudad situada en el norte de España, en la costa del golfo de Vizcaya y a veinte kilómetros de la frontera con Francia. La ciudad es la capital de la provincia de Guipúzcoa en la comunidad autónoma del País Vasco. La población del municipio es actualmente de 186.122 habitantes (2011).

En el siglo XIX los habitantes se dedicaban a la pesca y a la actividad mercantil. El territorio circundante aparecía salpicado de caseríos dedicados a las faenas agrícolas. Situada en un área de contacto entre dos regiones diferentes, el mar y las tierras interiores, la ciudad contaba con rutas terrestres y el río Urumea para acceder al litoral y potenciar su actividad mercantil. Por este hecho la ciudad contaba con un puerto marítimo y otro fluvial (Santa Catalina), además del puerto de Pasajes, que durante siglos estuvo bajo jurisdicción donostiarra.

Este cuadro representa al siglo XIX, concretamente al 31 de agosto de 1813, final de largos años de guerra y miseria. En 1808 Napoleón, representante del ejército francés, firma con Carlos IV de España un acuerdo de colaboración para que fuera su aliado en la conquista de Portugal. Así, las tropas francesas entraron en España sin ninguna resistencia. Carlos IV abdica y su hijo Fernando VII es nombrado rey de España. Murat, cuñado de Napoleón, convence al rey y a su padre para que vayan a Bayona, donde Carlos IV abdicará a favor de Napoleón. El dos de mayo de 1808 comienza la guerra de la independencia. Los ingleses y los portugueses se alían con los españoles. Esta guerra no acabará hasta 1814.

Como consecuencia, la ciudad queda totalmente destrozada. Era entonces un núcleo urbano dotado de un plano regular de tipo geométrico, que tenía una extensión de 6,4 hectáreas y una orientación de 60º E. Además disponía de una importante jurisdicción sobre el territorio rural y otros núcleos menores circundantes.

A partir del primitivo castillo medieval de Urgull se construyeron diversos cinturones de murallas que limitaron físicamente su desarrollo hasta el siglo XIX. En los siglos XIII y XIV, la villa sufre una serie de incendios, generalizándose las construcciones de piedra a partir del destacado incendio de 1489.Ya en el siglo XVI se acometen las obras de construcción y ampliación de las nuevas murallas. Estas obras seguirán realizándose a lo largo del siglo XVII y en menor medida en el XVIII. Esta etapa finalizó con la destrucción casi total de la ciudad en 1813.

Existe una elevada densidad de las edificaciones en la parte central de la ciudad, con una gran competencia por el uso del suelo. Por ello, Los edificios se sitúan unos junto a otros, dando lugar a una edificación compacta, cuyo ejemplo típico es la manzana en torno a un patio central.

En la provincia, se fueron formando dos bandos políticos, carlistas y liberales. Ambos defendían los fueros, pero de diferente manera San Sebastián optará por el liberalismo frente a la mayor parte de la Guipúzcoa rural. Por ello, en el siglo XIX se procederá a derribar las murallas, que limitaban el desarrollo de la ciudad.

San Sebastián cambia de orientación. Terminada su etapa como fortaleza pasará a cumplir la función de capital de la provincia, comenzando su expansión reflejada en el Plan de Antonio Cortázar para la nueva ciudad.

Beatriz Sánchez-Tembleque