La imagen con la que vamos a trabajar es una ilustración del cosmógrafo Sebastian Münster, perteneciente a su obra Cosmographia, que es la primera descripción del mundo en alemán y en uno de los libros de Geografía más importantes del siglo XVI. Münster nació en Alemania en 1488 y falleció en Suiza en 1552. A lo largo de su vida destacó por ser profesor de hebreo en la Universidad de Basilea (1527), así como por traducir la Biblia al latín y publicar numerosos textos en diversas lenguas. Como hemos mencionado anteriormente su gran obra es Cosmographia, cuya primera edición en alemán apareció en 1544 y posteriormente se han ido publicando alrededor de 40 ediciones en otros idiomas.
La ciudad que aparece representada en la ilustración es Sion, perteneciente al condado de Valais, es una de las ciudades más antiguas de Suiza. Los primeros habitantes de esta ciudad se remontan al periodo del Neolítico, hace unos 7.000-5.000 años a.C. El nombre actual de Sion, deriva del latín “Sedunum” que a su vez desciende de la tribu celta de los Sédunes, lo cuales se asentaron en la región fundando un poblado estable. Tras los celtas, fue ocupada por los romanos, los señores de Borgoña, los de Saboya y Napoleón, hasta que en 1815 Valais acabo uniéndose a la Confederación Helvética.
La ciudad de Sion se encuentra situada en el valle del río Ródano, rodeada por los Alpes berneses al norte y los Alpes valesanos al sur. Como podemos observar en la imagen, estaba protegida por tres murallas, de las cuales hoy sólo quedan algunos restos. Debido a la topografía de esta zona geográfica, podemos observar que en la cima de los montes se situaban los dos castillos de la ciudad, con el fin de facilitar la defensa ante posibles adversarios. En la zona más baja de este paisaje, se localizaba el resto de la ciudad con un centro histórico medieval estructurado en pequeñas calles, estrechas y sinuosas, entre las cuales podíamos encontrar numerosas iglesias, monumentos importantes, así como las casas más humildes de la población. Desde el siglo VI, Sion se convirtió en sede episcopal. La actividad económica de esta ciudad se basaba en la agricultura, el comercio y el arte.
Entre los elementos más destacados de esta imagen podemos citar el castillo de Tourbillon (izquierda) y el castillo y la catedral de la Valère (derecha), ambos situados en lo alto de las dos colinas. El castillo de Tourbillon fue construido entre los años 1290 y 1308, ocupando una posición defensiva en lo alto de una de las colinas. A lo largo de la historia, este castillo ha desempeñado un papel muy importante en la ciudad. A pesar de los numerosos ataques, el castillo de Torubillon ha sufrido una serie de reconstrucciones que le llevaron a convertirse en la residencia de verano de los obispos de la época. Pero en 1788, se produjo un gran incendio del cual no se llegó a recuperar, por lo que hoy en día quedan las ruinas.
En cuanto al castillo de la Valère, fue construido en 1049 como residencia para los nobles de Sion. Unos años más tarde, en lo alto del complejo, se construyó la basílica de la Valère, dedicada, un edificio de carácter fortificado que cuenta con elementos románicos y góticos. A pesar de haber sobrevivido a tiempos difíciles a lo largo de la historia, este castillo quedó abandonado tras la revolución Helvética en 1798. Cien años más tarde, el cantón del Valais se hizo cargo de la conservación del castillo y la basílica, convirtiéndolos en un museo que prevalece hasta nuestros días.
Otros elementos a destacar de la ciudad serían la catedral de Sion, dedicada a la virgen de Notre Dame du Glarier, que fue construida en el siglo XIII sobre un antiguo templo románico y se caracterizaba por su cripta y campanario. También, cabe señalar la Torre de los Hechiceros, una prisión construida en el siglo XIV donde se encerraban y torturaban a todas aquellas personas acusadas de brujería.
Pese a los numerosos ataques y saqueos que ha sufrido la ciudad a lo largo de la historia, Sion ha sabido recuperarse. Hoy en día se ha convertido en una de las ciudades más turísticas y visitadas de Suiza, tanto por su casco histórico y barrio comercial, como por la zona vinícola en la que se encuentra. Además, cabe destacar el atractivo que ofrecen los deportes de invierno por su proximidad a los Alpes. En la actualidad, Sion es el centro económico del condado de Valais y un importante nudo comunicaciones.
Claudia Martínez López