Este cuadro pertenece a la Wallace Collection de Londres y se centra en la representación de la Iglesia de Santa María della Salute en Venecia, hacia el año 1725. Su autor es el italiano Giovanni Antonio Canale (1697-1768), más conocido como Canaletto, un gran pintor veneciano del siglo XVIII, especializado en retratar paisajes y monumentos. Canaletto, en sus primeros trabajos, enfocó sus cuadros hacia las miserables casas o las canteras, alejándose de la tópica visión de la ciudad. Sin embargo, este tipo de trabajos no gustaba a sus clientes, así pues, no dudó en cambiar y ofrecer al espectador la Venecia más turística. Esta obra es una veduta, una representación de una ciudad, en perspectiva, en la que se reproducen imágenes panorámicas de la ciudad, describiendo con minuciosidad los canales, monumentos y lugares más típicos de Venecia. Así pues, se trata de un cuadro con perspectivas muy urbanas, muy característico de la pintura barroca italiana, donde se aprecia la vida social de esta época.
Cabe destacar que Venecia, capital de la región de Véneto, es conocida como «la ciudad de los canales» y se considera la joya del mar Adriático, está construida sobre un archipiélago pantanoso situado en una laguna e integrada por 118 pequeñas islas, unidas entre sí por 455 puentes. Su estructura es irregular y se encuentra situada en el nordeste de Italia. Esta ciudad recibe más de quince millones de visitantes cada año y, debido a su inmenso poder cultural, el casco histórico de la ciudad y la laguna, fue reconocido por la UNESCO con la distinción de Patrimonio de la Humanidad en el año 1987. Cabe destacar que, en la actualidad, la ciudad se encuentra en peligro debido a las inundaciones y a la lluvia ácida. Del mismo modo, el turismo, uno de los motores más importantes de la economía de la ciudad, actualmente se encuentra pasando uno de los momentos más difíciles debido a la situación económica por las que está atravesando el país.
El Carnaval de esta ciudad es el evento más conocido a nivel mundial. Esta fiesta, fue durante siglos, la vía de escape para evadirse del gran control del gobierno veneciano. El Carnaval ha pasado por varias etapas y, en el siglo XIII, se declaró como festividad suprema, alcanzando su máximo esplendor en el siglo XVIII. Pero esto no siempre ha sido así, ya que, tras la invasión del ejército de Napoleón en Venecia, esta fiesta quedó prohibida por miedo a que se generaran conspiraciones. También, con la decadencia de Venecia como poder mercante y militar, la fiesta decayó casi hasta desaparecer, pero, gracias al potencial turístico que posee esta ciudad, Venecia se recuperó hacia finales del siglo XX.
En este cuadro se muestra un extraordinario realismo de la ciudad, contando con una gran concepción barroca del paisaje, con complejas composiciones y profundidad de los elementos y con la gran diversidad de focos de luz que podemos apreciar. También nos permite observar la actividad humana de esa época, ya que, Venecia fue un importante centro comercial y minero gracias a su emplazamiento y a su situación geográfica. Así pues, la imagen de Canaletto, nos muestra la conexión entre el mar y la salida de la Plaza de San Marcos. Esta última era el centro neurálgico de las actividades comerciales y sociales en el siglo XVIII.
A la derecha de la obra podemos encontrarnos el Palacio Ducal, uno de los símbolos de la gloria y el poder de Venecia, sin olvidarnos de que también fue residencia de los magistrados supremos y de los máximos dirigentes de las repúblicas marítimas de Venecia y Génova. Se trata de un edificio de estilo gótico, la fachada que nosotros podemos observar se encuentra mirando hacia el Gran Canal, cabe destacar que es muy curioso cómo cambia de color la fachada del Palacio según la luz del día que éste reciba. En el siglo IX comenzó siendo un castillo fortificado, pero tras un incendio tuvo que ser reconstruido y fue utilizado como fortaleza y prisión.
A la entrada o salida de la Plaza de San Marcos, según lo veamos, se encuentra la estatua que corona la Columna de los Santos Marco y Teodoro y, a la izquierda, nos encontramos con el Gran Canal, el más grande e importante de todos los canales que recorren Venecia. Tiene casi 4 km. de longitud, ya que va desde la punta noroeste de Venecia hasta la dársena de San Marcos. De esta forma, recorre la ciudad dividiéndola en dos. Desde que Venecia se convirtió en potencia política, este canal ha sido la vía principal para el trasporte de la ciudad y, como podemos comprobar, estaba lleno de barcos que iban hasta el Mercado de Rialto, uno de los principales centros comerciales de Venecia en el que se realizaban muchos intercambios comerciales.
Para Canaletto, el tema principal de esta obra es la Iglesia de Santa María della Salute, representada al fondo del cuadro. Se trata de una enorme iglesia barroca y una de las más impresionantes obras arquitectónicas de Venecia. Balsassare Longhena comenzó a construir la Iglesia en el año 1630. La iglesia se edificó como acción de agradecimiento tras la batalla que libró a la ciudad contra la peste del año anteriormente citada. Así pues, el nombre de la iglesia: Salute (que significa salud y salvación) hace referencia a este hecho. Aún hoy en día, cada 21 de noviembre los fieles acuden en barcos, a través de un puente, en memoria de gratitud.
Carmen Maestre